Dr. Christopher J. Matthews

Se examina la importancia de la traducción de la Biblia del Oso y la ayuda esencial de los que apoyaron en ella. No fue menos que un trabajo en equipo para los ex-monjes Casiodoro de Reina, Antonio del Corro y Dr. Juan Pérez de Pineda, todos del Monasterio de San Isidoro en Sevilla, la capital de Andalucía en el sur de España en el siglo XVI.

El caso curioso de 1569, cuando Casiodoro de Reina intentaba terminar la última revisión de su obra magistral, La Biblia del Oso, gira en torno a la colaboración de sus colegas y ex-monjes Dr. Juan Pérez de Pineda y Antonio del Corro.

Juan Pérez había publicado el Nuevo Testamento en Ginebra en 1557 bajo presión para enviar unos cuantos del mismo a Sevilla y otras partes de España en ayuda de los monjes del convento de San Isidoro en Santiponce.  Había gran demanda por un Nuevo Testamento ya que lo mismo había sido publicado años anteriores en francés y distribuido en puntos principales de Andalucía.

El Dr. Pérez uso el tiempo de sus últimos años de vida para terminar la revisión del Nuevo Testamento, gracias especialmente al nuevo sistema que servía para marcar los versículos con números, detalles importantes que faltaban que el original de 1557.  

Casiodoro necesitaba revisar la última porción de su traducción, que iba de la 2ª Carta a los Corintios, hasta el Libro de Apocalipsis, y espweraba ver el Nuevo Testamento de Pérez, pero no podía encontrar copia ninguna. Envió a Antonio del Corro con rapidez a París para ver si la nueva revisión de Pérez estaba lista para la necesidad de la hora, así Casiodoro esperaba con preocupación la llegada de un paquete, una porción, o algo para ayudarle a confirmar su propia obra antes de imprimirse.

Esta conferencia formó parte del ciclo que celebra el Año Internacional de la Traducción Bíblica 2020